Entre la muerte del rey que rabió y el advenimiento al trono de la reina Mari-Castaña existe un largo y obscuro período en las crónicas, de que quedan pocas memorias. Consta, sin embargo, que floreció en aquella época un rey Buby I, grande amigo de los niños pobres y protector decidido de los ratones.
Estas navidades conocí al nieto de un amigo de Alfonso XIII, hijo de militares, persona con historia a sus espaldas, pero a mi pesar, persona discreta.
Estas navidades conocí al nieto de un amigo de Alfonso XIII, hijo de militares, persona con historia a sus espaldas, pero a mi pesar, persona discreta.
Me contó algunas curiosidades, entre otras el origen del ratoncito Pérez, ilustre animalito que ha trascendido nuestras fronteras.
El autor del cuento Ratón Pérez, fue un jesuita Jerezano, el Padre Luis Coloma, contemporáneo de los grandes escritores realistas y costumbristas de finales del siglo XIX y más conocido por las adaptaciones al cine de sus obras Pequeñeces (1949, Juan de Orduña) y Jeromín (1953, Luis Lucia).
Hacia 1894 le pidieron desde la corte, al padre Luis Coloma que escribiera un cuento cuando a Alfonso XIII, que entonces tenía 8 años, se le cayó un diente. Al jesuita, tutor de Alfono XIII, se le ocurrió la historia del Ratoncito Pérez, protagonizada por el Rey Bubi, que era como la Reina Doña María Cristina llamaba a su hijo.
En este cuento se narra el maravilloso viaje que realiza el pequeño Bubi convertido en ratón de la mano del Ratón Pérez para que conociese como vivían sus pequeños súbditos, algunos muy pobres como el niño Gilito. Bubi aprendió valores como la valentía, el cuidado de sus súbditos y la generosidad.
El ratón vivía con su familia dentro de una gran caja de galletas, en el almacén de la famosa confitería Prast, en el número ocho de la calle del Arenal, en el corazón de Madrid, a unos cien metros del Palacio Real. D. Luis Coloma sitúa la casa del ratoncito Pérez en un lugar que el niño Alfonso XIII conocía muy bien, pues la Confitería Prast era proveedora de la Casa Real.
El Ayuntamiento de Madrid rescató la memoria del Ratoncito instalando una placa en la calle del Arenal, número 8. En la placa puede leerse: “Aquí vivía, dentro de una caja de galletas en la confitería Prast el Ratón Pérez, según el cuento que el padre Coloma escribió para el niño rey Alfonso XIII”.
La primera edición de este cuento se editó en 1902 y se reeditó en 1911. Su manuscrito se conserva desde 1894, en la biblioteca del Palacio Real.
Aquí podéis leer el cuento.
0 comments:
Publicar un comentario